MARCO POLO HORIZON: UN CAMPER MERCEDES-BENZ

El Mercedes-Benz Marco Polo Horizon es la opción intermedia de la gama camper de la firma alemana, sin mobiliario, nevera ni agua. Tiene un precio de salida de 40.087 euros.

La unidad probada es la versión limitada Designo Hyacinth Red Metalliclucía con paquete AMG Line.

El camper Mercedes-Benz Marco Polo Horizon se presentó el año pasado como modelo intermedio entre la variante de acceso Activity y la tope de gama Marco Polo. Hace unas semanas decidimos poner a prueba la alternativa más equilibrada económicamente pero menos independiente, al no tener cocina ni agua, a lo largo de una ruta de tres días por la costa cantábrica.

Las vistas de la costa cantábrica han sido objeto de series españolas e incluso de calado internacional. Sus frías playas y pueblos con encanto son de los destinos favoritos de los turistas nacionales y no es para menos. Disfrutar de la tranquilidad, la naturaleza y el clima relajado son sus grandes bazas frente a los calurosos días estivales y un motivo de peso para ir a descubrir lo que esconden sus carreteras menos concurridas. Para esa nueva aventura escogimos un camper con espíritu hippie pero de estética sofisticada y prestaciones dignas de su nombre, el nuevo Mercedes-Benz Marco Polo Horizon.

La ruta estaba marcada, los destinos iban a ser Saunces, Santillana del Mar, Comillas, San Vicente de la Barquera y finalmente, Potes a través del Desfiladero de la Hermida. Las imágenes hablan por sí solas, el entorno nos acompañó en nuestro primer contacto con un modelo a medio camino del Marco Polo, que enfrentamos con el California hace un año.

El Horizon sale al mercado desde 40.087 euros, algo más que la versión Activity (36.261 €) y casi 2.800€ menos que el icónico Marco Polo. La unidad probada es una edición especial y limitada denominada Designo Hyacinth Red Metalliclucía, claramente identificable por su color rojo llamativo y sofisticado. Eso sí, lo más destacado de su diseño son los elementos que añade el Paquete AMG Line (4.484 €), que afectan tanto a su carrocería como al interior del modelo. Las llantas de aleación de 19 pulgadas, las molduras AMG, las pintas de freno con distintivo de la marca o las molduras mejoran su aspecto exterior mientras los pedales deportivos o el volante de cuero (opcional) le dan el toque sport al habitáculo. El techo desplegable en color negro llega al incorporar el paquete Night, a juego con los retrovisores, que además se pliegan automáticamente al cerrar las puertas.

En conjunto, nos parece una estética cuidada, elegante y de línea muy deportiva. Las dos puertas correderas laterales (opcionales con el pack AMG) ayudan a que el acceso al interior sea amplio y cómodo, lo cual es un punto clave durante una ruta de tanto días, en las que las necesidades de entrar y salir son la norma. Por otro lado, el portón trasero ofrece un acceso muy cómodo a la zona del maletero y además resulta muy práctico para que los momentos de lluvia no te impidan acceder a él. Eso sí, pesa bastante y se echa en falta una ayuda automatizada Easy-Pack (+810,70€).

Lo primero que llama la atención en su interior es el salpicadero, que ha sido actualizado en esta versión. En la consola central un sobrio cuadro de mandos (todavía analógico pese al pantalla tft central), la pantalla multifunción con navegador y la botonería clásica y el joystick para controlar el infotaintment. Si bien estéticamente es impecable, el manejo a través del joystick nos ha parecido menos práctico que una pantalla táctil. Una pega que le encontramos a un vehículo tan rutero es que no haya hueco para dejar un refresco o café al alcance de tu mano, está en el túnel inferior.

En cuanto accedes a sus plazas delanteras te sobreviene una sensación de calidad y amplitud muy característica de los diseños Mercedes. La adaptación del lenguaje que utilizan los de la estrella en los turismos ha sido un acierto y es más fácil sentirse cómodo con apenas ligeros cambios lógicos al estar sobre la base de una Viano de nueva generación. La posición de conducción es, claramente, más elevada que la de un vehículo convencional pero los asientos delanteros tienen una buena sujeción y permiten un ajuste lumbar perfecto.

En el apartado de conectividad, a parte del Bluetooth al que cuesta conectarse, dispone de una ranura para tarjetas SD y dos USB’s, que si bien es perfecto porque permiten conectar más de un dispositivo a la vez, están en un punto que no resulta del todo fácil acceder. A parte, tiene tres tomas de 12V, una en la parte delantera, una en la parte central y otra en el maletero. El cuadro de mandos de la calefacción estacionaria Webasto está ubicado en la parte inferior de la consola central. Tiene cuatro botones y pese a que su función es excelente su manejo resulta poco intuitivo. El paquete de aparcamiento con cámara 360° Parktronic (+1.852,51 EUR) te hace la vida mucho más fácil a la hora de maniobrar.

La unidad probada montaba el motor 250d o lo que es lo mismo, un bloque de 2143 centímetros cúbicos que rinde 163 CV y va unido al cambio automático 7G-Tronic Plus. Nuestro modelo no traía la tracción 4MOTION por lo que hablamos de un vehículo tradicionalmente trasero con unos consumos homologados por marca de 7,0 litros a los cien. Durante la ruta realizada por carreteras secundarias, pistas y atravesando muchos pueblos ha marcado 8.1 l/100 km. Su peso es de 2.440 kilogramos.

Las horas que hemos pasado al volante han sido realmente cómodas. Además, durante todo el recorrido, el Marco Polo Horizon se ha mostrado muy estable y confortable a nivel de suspensión. Al estar por detrás del eje delantero, la conducción es similar al de un vehículo convencional de la firma.

La vida en el interior nos ha parecido de nota y merece un punto y aparte pese a no llegar al nivel de lo ofrecido por el Marco Polo, tampoco cuesta lo mismo. Después de nuestra ruta, podemos afirmar que el acabado de los materiales y la amplitud nos permitieron sentirnos a gusto, con libertad de movimientos y sin generarnos ningún agobio. El detalle de no montar muebles para adaptar la nevera, cocina y fregadero ayuda a que su habitáculo sea más espacioso.

Junto a los asientos traseros encontramos reposabotellas y algún que otro hueco para guardar equipaje o comida no perecedera. También hay una mesa interior plegable (+757,46 EUR), anclada sobre raíles y con un tamaño óptimo. Los dos asientos de la parte delantera, al ser giratorios, se colocan frente a los asientos traseros y junto a la mesita crean un espacio perfecto para disfrutar de una buena cena, desayunos y largas sobremesas. El sistema de iluminación LED interior está bien distribuido y ofrece una ambientación cálida y agradable.

A la hora de dormir, la cama superior nos ha parecido más cómoda que la inferior. Ésta última se monta fácilmente, es un poco más ancha que la de arriba y la marca ofrece una especie de esterilla que aplana la superficie para que la costura de los asientos no se note tanto. Sin embargo, y como ya sucede en otras variantes, la cama del techo tiene un somier más cómodo, además de dos ventanas laterales que te permiten ver lo que pasa en el exterior.

CONCLUSIONES

Tras vivir de cerca la experiencia de “rutear” con un Mercedes-Benz Marco Polo Horizon la conclusión es sencilla: es la opción ideal para rutas cortas y de pocos días donde necesitas un sitio para dormir y un espacio interior amplio y confortable. Al faltarle el mobiliario es más complicado realizar un viaje de forma completamente independiente, acabando en restaurantes o campings para poder realizar algunas actividades básicas. Su comportamiento dinámico es sorprendentemente similar al de cualquier SUV del mercado actual y su peso apenas se hace notar gracias a la potencia de su bloque de 163 CV. Montar la tracción total sería un acierto en caso de querer vivir una aventura más alejada de las carreteras asfaltadas pero también aumentará el consumo.

Como punto negativo: Nos hubiese gustado encontrar más huecos para guardar y almacenar cosas, al igual que en las puertas laterales y traseras, hubiese opción de guardar mesas y sillas exteriores. El sistema de infotaintment sigue siendo un punto débil frente al intuitivo sistema de su rival más directo, el Volkswagen California (prueba de la versión Beach aquí). Su precio también es uno de los grandes inconvenientes, pero no es el único camper que lo sufre. Pese a tener un precio de salida que ronda los 40.000 euros, si empezamos a sumar infinitos extras, motorizaciones y acabados su precio no bajará de los 64.000 euros.

- Anuncio -

Más historias

Artículos relacionados